marzo 22, 2024
El agua y la agricultura, dos pilares fundamentales para la vida en la Tierra, se encuentran en una encrucijada crítica. La creciente escasez de agua, el cambio climático y la expansión de la población presionan sobre este binomio vital, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria y el futuro del planeta.
La agricultura, responsable del 70% del agua dulce consumida a nivel mundial, enfrenta un desafío mayúsculo. La necesidad de aumentar la producción para alimentar a una población que alcanzará los 9 mil millones de personas en 2050 choca con la realidad de un recurso cada vez más escaso.
El cambio climático, con sus patrones climáticos extremos y la intensificación de las sequías, agrava la situación. Los cultivos se ven afectados, la productividad se resiente y las tierras agrícolas se degradan, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria de millones de personas.
Sin embargo, la esperanza no se agota. La innovación y la adopción de prácticas agrícolas sostenibles ofrecen soluciones viables para enfrentar este panorama desafiante. En ese orden de ideas La agricultura inteligente representa una solución innovadora para afrontar los desafíos del siglo XXI, especialmente en lo que respecta al uso eficiente del agua.
Acontinuación te presentamos una combinación de tecnologías y prácticas agrícolas con las que se busca optimizar la producción de alimentos, reducir el impacto ambiental y garantizar la seguridad alimentaria a largo plazo:
La Teledetección satelital: permite observar los cultivos de a gran escala de manera remota y no destructiva. Gracias a la periodicidad de las imágenes satelitales, es posible obtener series temporales que permiten hacer un seguimiento del estado fenológico de los cultivos, detectar patrones de crecimiento, requerimientos de agua y demás factores que determinarán su producción.
Sensores y análisis de datos: Permiten monitorizar en tiempo real las condiciones del suelo, el clima y el estado de los cultivos, facilitando la toma de decisiones precisas para el riego y la fertilización.
Riego inteligente: Sistemas como el riego por goteo o la microirrigación optimizan el uso del agua, aplicándola solo donde y cuando se necesita.
Automatización: Robots y drones pueden realizar tareas como la siembra, la cosecha y el control de plagas, reduciendo el consumo de agua y la mano de obra.
Asesoría técnica AGROMICH: Nuestros asesores técnicos capacitados correlacionan los datos obtenidos a través de la teledetección y la sensorización para complementar su inspección técnica en campo, esto con la finalidad de obtener un diagnóstico más completo y emitir su recomendación más asertiva.
Este sistema está directamente relacionado con la agricultura sustentable porque permite detectar a tiempo lo que el cultivo necesita y recomendar solo lo necesario.